Never give up

En este apartado te quiero mostrar que las lesiones NO son un impedimento para estar en forma; quien dice "lesión", dice cualquier motivo por el que no puedes realizar ejercicio con "normalidad". Normalidad entre comillas porque en la vida no hay nada establecido como "normal" o "anormal", sino que uno mismo concibe su propia percepción de la "normalidad" en función de su contexto, sus actos y su rutina. En el caso de la actividad deportiva, la normalidad para ti será aquello que sueles hacer diariamente/semanalmente, lo cual no será lo mismo de lo que hago yo o de lo que hacen tus familiares -por ejemplo-.

Para mí era "normal" realizar ejercicio dos veces al día, hasta que el octubre del 2014 una lesión me hizo parar y pasar por quirófano en marzo del 2015. A mediados de mayo de ese mismo año me dieron el alta, pero este pasado octubre -2015- volví a sentir la misma sensación que había notado un año atrás y, semanas más tarde -después de intentar que se me pasara el dolor-, volví a visitar al traumatólogo. Ligamento Cruzado Anterior (L.C.A.) roto me dijo, no obstante, yo no me lo quise creer y esperé a los resultados de la resonancia magnética (técnica usada para obtener información sobre la estructura y composición del cuerpo). Efectivamente, el traumatólogo no se había equivocado, por lo que me prohibió hacer la mayoría de actividades deportivas. La noticia me cayó como un jarro de agua fría, ya que llevaba un año parada por una lesión y tenía que pasar por lo mismo (esta vez unos meses más, incluso)... El traumatólogo me dio un mes para ver si ganando masa muscular mi rodilla se adaptaba a esta lesión, pero nada, el dolor seguía ahí, por lo que tuvimos que asignar una nueva fecha para pasar por el quirófano, otra vez (tercera vez en dos años). Volví a escoger la misma fecha que el año pasado -2 de marzo- con la esperanza de que esta operación fuera mejor que la anterior. El año pasado entré al quirófano pendiente de operarme el menisco externo y el L.C.A., pero a última hora decidieron que el L.C.A. estaba bien y ni lo tocaron. Un año más tarde una nueva resonancia magnética demuestra que lleva un año roto, motivo por el cual he de volver a pasar por el quirófano. Además, también tengo roto el ligamento anterolateral -un pequeño ligamento de la rodilla-...

 ¿Mala suerte? Quizás... Lo que está claro es que este año no me tomaré la lesión como el anterior, no...el año pasado deje de hacer ejercicio y me descuide bastante, pero este año no haré lo mismo. Este año quiero llegar a la operación más en forma que nunca y, una vez operada, mantener esa forma. ¿Imposible? ¡Nada es imposible hasta que no lo intentas! Está claro que tendré que reorganizar mi rutina, mi actividad física, mi alimentación y mis descansos para poderlo conseguir, pero ni todos los inconvenientes del mundo serán suficientes para evitar que intente llevar a cabo este "experimento".

¿Estás conmigo? ¡Seguro que con esta experiencia verás que ni todos obstáculos del mundo son suficientes para vencer las ganas de conseguir lo que te propongas!

© 2015 Andrea Rius; Educadora, deportista y aficionada en superarse día a día.  
Creado con Webnode
¡Crea tu página web gratis! Esta página web fue creada con Webnode. Crea tu propia web gratis hoy mismo! Comenzar