Home sweet home

Hoy me encuentro muchísimo mejor, hasta el punto que he podido dormir del tirón. Todo un logro, la verdad. Si no fuera por Thor (mi gatito), que me ha despertado a cuartos de siete para comer, hubiera dormido más que una marmota en pleno invierno... ¡imagínate! Una vez levantada, he desayunado y me he puesto a fisgar un poco por internet, para ver que acontecimientos han sucedido estos días; aunque la verdad es que no me he perdido nada interesante. Más o menos, el mundo está igual...

Cambiando de tema; mi pareja, el gato y yo nos habíamos quedado un par de días en casa de mis padres, por si yo necesitaba ir al hospital, ya que no disponemos de coche. No obstante, viendo mis sensaciones hemos decidido abandonar la casa de mis padres y volvernos a instalar en nuestra casa, definitivamente (o eso espero...). 

Igual que cuando vuelves de un largo viaje o cuando llegas a casa después de una dura jornada laboral, cuando he entrado a casa he pensado: "hogar, dulce hogar". ¿Acaso esta sensación no te da ganas de tirarte directo/a a la cama, de ir a la cocina a hacerte algo (o coger lo primero que encuentres en la nevera), de tumbarte en el sofá o, simplemente, de hacer lo que te de la real gana sin tener que dar explicaciones a nadie? Es una sensación tan agradable... ¡es como liberarte del mundo con tan solo cerrar la puerta de casa! Si es que realmente la vida es más sencilla de lo que nos la  hacemos... ¿no crees?

En definitiva, a lo que iba... Hoy he aprovechado la mañana para hacerme un hueco en el sofá-cama (el cual hemos abierto para mi comodidad) y preparármelo a mi medida; bandeja multiusos encima, colchón debajo de la pierna, cojines a montones (nunca están de más), mesita para dejar vasos u otros artilugios al lado, bolsa con medicamentos a mano, manta por si hace frío a la izquierda, calefactor delante, mando de la TV y de la Play cerca por si los quiero usar, portátil, revistas y libros a tocar, televisión enfrente...  

Aprovechando para hacer avances en la web con Thor.
Aprovechando para hacer avances en la web con Thor.

Imaginándote la situación puedes estar pensando: "¿qué más puede pedir?", a lo que yo te pregunto "¿andar ya sería demasiado?". Fuera bromas, la verdad es que es una situación complicada, aunque teniendo en cuenta las circunstancias, creo que no me puedo quejar... La pierna no me duele apenas, tengo todas las comodidades a mano y estoy bien acompañada. Dentro de unos días, o tal vez semanas, seguro que mi opinión no será tan positiva, pero por el momento no me quejo.

¡Mira si me encuentro bien hoy que tengo ya ganas de entrenar! Sólo tronco superior, claro; piernas creo que por una temporadita nada. Les he comentado a mi pareja y a mis padres que hoy quería entrenar, aunque casi me matan cuando se lo he dicho. De hecho, me han tratado por loca, así que mejor me esperaré unos días, al menos... Como mínimo hasta el lunes o martes, a ver si sigo tan bien yo y ellos bajan la guardia... 

Aprovechando que no podía entrenar y que he tenido tiempo, le he dado vidilla a la web, que estaba bastante muerta últimamente (en parte porque llevaba un mes sin internet). A partir de ahora ya me pondré más en serio con la web, ya que tengo tiempo para hacerlo. Espero que os guste (:


Sábado 5 de marzo


© 2015 Andrea Rius; Educadora, deportista y aficionada en superarse día a día.  
Creado con Webnode
¡Crea tu página web gratis! Esta página web fue creada con Webnode. Crea tu propia web gratis hoy mismo! Comenzar